lunes, 2 de mayo de 2011

Con recursos... puedes escribir. Antes de comenzar a escribir

Puede resultar difícil saber de qué escribir pero debemos tener en cuenta que una historia puede encontrarse en cualquier lugar. Lo importante es saber distinguir entre un buen argumento y un mal argumento. 

Consejos:
  • Observa la realidad con ojos de escritora.
  • Lleva siempre encima un cuaderno de notas y un bolígrafo para apuntar posibles ideas.
  • Reserva un espacio para escribir.
  • Planifica la estructura de lo que vas a escribir.
  • Piensa en un comienzo que enganche.
Recomendamos leer: Manual de técnicas narrativas de Enrique Páez

domingo, 3 de abril de 2011

Mujeres que se rebelan mediante la literatura

Todavía no he profundizado demasiado pero me he despertado pensando en la cantidad de mujeres que han sido estigmatizadas por querer ser ellas mismas, por no desear la vida que la sociedad o su familia le imponía. Mujeres, que además, se suicidaron, en la mayoría de los casos, jóvenes.

Podéis leer sobre katherine Mansfield cuya madre intentó por todos los medios "curarle" de su lesbianismo. Os recomiendo leer Diarios y Cuentos completos donde se recoge En un balneario alemán (1911) donde ya hizo una crítica a la vida cotidiana.

Quizás, más conocido sea el caso de Virginia Woolf que estuvo a favor de la independencia de la mujer y conocido por la mayoría es su ensayo Una habitación propia donde explica la necesidad de las mujeres de disponer de un cuarto propio para desarrollarse e ingresos periódicos que le permitan no depender. Aconsejo leer también Las olas, calificada como la mejor de sus novelas.

La escritora bostoniana Sylvia Plath acabó suicidándose tras varias crisis y un ingreso en un hospital psiquiátrico. Ella quería una vida para ella pero su madre y la sociedad esperaban que se casara y trabajara como mecanográfa cuando a ella lo que le apasionaba era la escritura. Existe una recopilación de sus poemas. Sólo escribió una novela: La campana de cristal. Os la recomiendo. Es semi-autobiográfica y nos introduce en su mundo interior, en sus pensamientos, en sus emociones y en aquella vida que le costaba vivir.  

También Charlotte Perkins Gilman tuvo una vida complicada. Tenía una salud delicada y su médico le prohibió leer y escribir porque le perjudicaba, tan sólo debía llevar una vida lo más doméstica posible y pasar todo el tiempo con su hija recién nacida. ¡Increíble! Ella se rebeló y continuó escribiendo. Podéis leer el relato El papel de pared amarillo, incluido en el libro Si yo fuera un hombre, donde cuenta la depresión que sufrió y que la llevó a separarse de su marido y replantearse sus ideales.

Janet Frame también recoge en Un ángel en mi mesa, su autobiografía, todos los problemas y dificultades que tuvo que vivir y cómo luchó por sobrevivir a su mundo interior. Al igual que Sylvia Plath la internaron en un psiquiátrico y le diagnosticaron, erróneamente, una esquizofrenia. En el momento en que iban a realizarle una lobotomía, le concedieron uno de los premios literarios neozelandes más importantes y la operación se anuló.

¿Conocéis otras mujeres escritoras que vivieran situaciones similares?

sábado, 2 de abril de 2011

Viajar en tren

Viajar en tren, aunque sea Guadalajara-Madrid o Madrid Guadalajara puede proporcionar aventuras excitantes y anécdotas para reirte después con las amigas.

Puedes quedarte tranquilamente dormida porque estás hecha polvo y despertarte cuando casi has finalizado el viaje. Eso hice el otro día, que trasnochar no es bueno. Cuando me desperté, no sabía dónde estaba, de hecho, empecé a dudar si me había subido al tren adecuado. ¿Por qué?Creía yo haber cogido un Civis (trenes que hacen el recorrido Chamartín-Guadalajara en la mitad de tiempo porque no tienen todas las paradas. ¡Bueno, una gozada!) porque eso ponía en las pantallas. El caso es que cuando me desperté de mi siesta había pasado ya tiempo suficiente casi para haber ido y vuelto, jejeje... con lo que hablé conmigo misma: 
-¿Estoy en un Civis? 
-Por la hora, no parece. Hace rato deberíamos haber llegado y estamos aún en Alcalá. Y hemos parado en Alcalá Universidad. No, no estoy en un Civis. El Civis no para ahí.
Después NO paramos en Meco.
-Entonces estoy en un Civis- me digo. No ha parado en Meco. Los Civis no paran en Meco.

En fin, que no entiendo nada, estoy recién despierta, ¡qué le voy a hacer! Decido entonces dejar de pensar y beber un poco de agua a ver si me aclaran las ideas. ¡Qué sed da dormir!
Abro mi botellita de 33cl, cuerpo azul, tapón blanco, ya estoy salivando... En ese momento, desconozco por qué actué de una manera tan imprudente, me dio por buscar algo en el bolso, digo algo porque no recuerdo el qué, lo que acentúa más mi imprudencia, ¿no? Si ni siquiera soy capaz de recordarlo...

-Cuidado, cuidado -es lo que me despierta de mi absurdo ensimismamiento con el bolso.
Levanto la vista y veo a la chica que está sentada en frente de mí
-La botella -me dice, muy tranquila, muy educada, muy contenida.
De la misma forma, tranquila, educada y contenida contesto: ¡Mierda!
Estoy volcando el agua.
-¡Mierda! -digo para mí mientras siento una vergüenza inmensa.
-No pasa nada, tranquila -me dice "mi compañera de viaje" tranquila, educada y contenida. ¡Qué valor!
-Lo siento, lo siento, lo siento -no dejo de repetir. 
-Uf, mi bolso no se ha mojado -pienso para mí misma.
-Lo siento.
-Que no pasa nada, de verdad.
Al rato le digo:
-Menos mal que no había mucha agua, eh? -y pienso inmediatamente que me podría haber callado la boca.


Bueno, ya está, Noelia, no le des más vueltas. Tenías sed, el agua que tenías la has volcado, con lo que ya te tienes que esperar a que llegues a casa. Pero mira el lado positivo: no te has mojado tú, has echado todo el agua a la chica que estaba sentada frente a ti.

miércoles, 30 de marzo de 2011

Nuestro logo

Ya tenemos el logo de En un mundo a mi medida terminado. Damos las gracias a Javier Albuisech http://ink-love-music.blogspot.com/ que es el que lo ha creado.

¿Os gusta?

Pd. Haceros fans en Facebook o seguidores en Twitter. ¡Participad! Agradecemos vuestra colaboración

viernes, 25 de marzo de 2011

Mi descanso

Tras este breve Kit-Kat, o laaaaaargooooooo, según se mire, he regresado para dar un poquito de guerra.

No penséis que he estado perdiendo el tiempo, que no, tengo poco tiempo así que como para perderlo.

Espero poder retomar con asiduidad el blog y escribir y compartir con vosotras/os libros, anécdotas, noticias, enlaces, etc. interesantes. Ideas tengo unas cuantas pero se agradecen cualquier tipo de colaboración y sugerencia, así aprendemos más.

Por el momento, he creado una página del blog en Facebook. En la columna de la derecha podéis, todas las personas que queráis, haceros fans. ¡Yuju! Aún le faltan algunas cosillas, como colgar la imagen final y, lo más importante, vosotras/os!!!!!!!!!!!! 

También andaré por Twitter @mmedida y por Linkedin con un grupo de Literatura y mujeres.

Espero que os guste.

lunes, 7 de marzo de 2011

Dar la cara

Sí. Me estoy preparando para dar la cara en el club de lectura. El tigre no muere. Ahora soy la que yo digo: No entiendo nada. No puede ser.

Pero como buena documentalista precavida, he guardado pruebas. Os las dejo. ¡Sois mis testigos!

Página 180. Segundo párrafo: Aunque tal vez pueda parecer una minucia, fue un detalle que me salvaría la vida y que pesaría sobre la de Richard Parker [es el nombre del tigre].

Y para que no creáis que me he cogido cualquier libro que sirva a mis propósitos, cito el libro: Vida de Pi de Yann Martel.

¿No creéis que la frase tiene su cosa? Si se piensa bien, quizás otra interpretación distinta de la muerte del tigre (a mí personalmente, es lo primero que se me viene a la cabeza) podría ser que éste pasa una vida de penurias pero... Sinceramente, en una novela las palabras tienen que estar bien escogidas. Todo tiene que ser un entramado invisible y bien construido que no genere falsas expectativas ni confunda ni que entorpezca la lectura.

¿Qué pensáis vosotras/os?

martes, 1 de marzo de 2011

Lo que no se debe hacer si se desea fomentar la lectura

¿Os ha pasado alguna que alguien os haya contado el final de un libro u os haya destripado una peli?

Si no os gusta que os hagan eso, no habléis conmigo. Dicen que hablo poco pero que cuando hablo...¡cuidado! Ayer, en el club de lectura, fue un día de esos.

Coordinadora: Noelia, ¿a ti qué te está pareciendo el libro? (La...) Aquí me surge un dilema. Quería poneros el libro pero si os digo cuál es también os lo habré destripado pero si no os lo pongo quizás nunca podráis leerlo.
Yo: Me está gustando. No lo empecé con muchas ganas pero me he enganchado. Lo que menos me gusta es que el autor anticipa acontecimientos y corta un poco la emoción de la lectura. En ese sentido, me siento defraudada. Antes de tiempo, sabes que el barco se hunde y que la familia desaparece y antes de tiempo sabes que el tigre se muere.

En ese instante, todas las miradas se dirigen a mí: ¿Se muere el tigre? Y yo, ups, trago saliva. Noe, has metido la pata, jeje... levanto la vista y me pongo a mirar el bonito artesonado del siglo XVII que cubre el techo del despacho de la directora, lugar donde nos encontramos.

Unos y otros; unas y otras: Yo no he leído eso. ¡Cómo que se muere! ¿Se muere? ¡Qué faena, yo que creía que iba a sobrevivir! 
Yo: Lo sientoooooooooo. No sé, lo cuenta el protagonista, digo acongojada.


Eso me pasa por leer con demasiada atención. Todo el mundo debatiendo sobre cómo será el desenlace entre el protagonista y el tigre y en un minuto la emoción de la lectura por la borda (nunca mejor dicho porque la novela transcurre en un bote) Pero yo no tengo la culpa que en la página 180 esté la clave y se sepa lo que para mantener la intriga debería saberse, quizás, cerca de la 250. Ey, pero no siempre hablo para meter la pata.