jueves, 10 de febrero de 2011

Las arterias

Al final, se acaba el día y no escribo. Hoy no tengo un despropósito, tengo un gran PROPÓSITOMe duele el corazón y no por amor o desamor. Os cuento, leed, leed...

Mañana, lo primero que voy a hacer nada más levantarme (después de ir al baño y quitarme las legañas) es salir a correr. Sí. No puedo posponerlo más. 2 meses han pasado desde la última vez y hasta aquí hemos llegado. Como os comentaba, tengo leves pinchacitos en mi corazón. ¿Por qué? porque tengo las arterias obstruidas. Estoy segura. Siento la grasa correr lenta y pesada por ellas. Lo noto. Me culpa pero no tengo fuerza de voluntad. Hoy me he comido 300 gr. de chocolate (2 tabletas) y acabo de cenar una pizza de chorizo con pimientos más rica... pero, claro, luego lloro por mis arterias. ¡Basta! Mañana a las 8, bueno, mejor a las 9 estoy corriendo por el parque.

Objetivo: 10 kms.  No sé si aguantaré porque me gusta correr con música y la batería de mi mp4 dura ya muy poco y sin música... Ya, ya, estoy poniendo excusas, lo sé. Please: deseadme ánimos y mucha energy, que falta me hace. Y ¿eso de la batería tiene arreglo o tendré que comprarme otro cachivache?

miércoles, 9 de febrero de 2011

Semana de despropósitos II

Las cosas que pasan. Y lo que me divierto yo con las cosas que pasan. Ahí van más despropósitos:
  • He tenido que apagar el teléfono fijo. Hace dos días tenía cerca de 16 llamadas perdidas. Y ninguna de familiares, amigos, compañeras de trabajo, conocidos o alguien que quisiera regalarme algo de forma desinteresada. Qué estrés. Sólo compañías de teléfono queriéndome engatusar. ¡Anda ya!
  • Un apretón en una estación de autobuses. ¡Lo peor!
  • Y sé que he tenido más pero este ha conseguido que los olvide

lunes, 7 de febrero de 2011

Semana de despropósitos

  • Y yo creyendo que si estaba con gripe o con un resfriado lo mejor sería quedarme bien abrigadita y resguardada en casa. ¡Los países nórdicos también nos llevan la delantera en esto! Ellos sacan todos los días, durante unos 10 minutos, a sus hijos e hijas al balcón, para que sus pulmones se aireen  y renueven y expulsen microbios. ¡Sí que saben! No como yo, que he estado moviendo virus de un sitio y a otro y así estoy: que paso de un dolor de garganta a uno de cabeza, sigo con dolor de oído y acabo con una congestión nasal impresionante. Tengo que aprender. ¡Mañana me aireo en el alfeizar de la ventana (jo, no tengo balcón)!
  • Llevaba cerca de un mes pronosticando que la falta de ejercicio me está convirtiendo en una galleta María. Y efectivamente, no me equivocaba. Cogí la bicicleta, ya que también es una forma de hacer deporte, aunque sea para desplazarme al lado. El caso es que notaba yo la falta de actividad física. Tanto, que bajando unas escaleras, perdí la fuerza, se cayó la bici y detrás fui yo. Afortunadamente, ni mi golpeé ni caí mal. No me han quedado secuelas (salvo las que ya tenía).

sábado, 5 de febrero de 2011

Microrrelato: Nuevos tiempos

―Carla, tráeme una cerveza cuando vayas a la cocina ―le exige Enrique, su marido.
Ella no responde y continúa observando el desagüe, que se traga el agua sucia de la palangana.
             ―Hija, cuando puedas, tráeme alguna revista para leer ―le pide su madre.
            ―Esa cerveza, amor.
―¡Estoy harta! ―se dice Carla a sí misma. Mira detenidamente el agujero negro que absorbe, sin preguntar, jabón, pelos, incluso, sueños. Porque eso piensa. Que sus ilusiones se las has tragado un mundo desigual.
            ―Maaaaami, se ha roto el coche ―grita Ana, la hija pequeña.
            ―Mamá ―le dice Iván tirando de su chaqueta― vete con tus amigas. En realidad, podemos arreglárnoslas solos.
            Carla sonríe. Quizás haya sido capaz de poner el tapón a tiempo.

viernes, 4 de febrero de 2011

Una empanada, por favor

¿No os sucede que llega un viernes, por ejemplo, y estáis empanados/as? Con harina y huevo. Es una sensación horrible. Yo me quedo mirando la pantalla del ordenador y me digo: escribe pero no me hago caso a mí misma. Seguro que también os ha pasado. Quizás, no escribiendo pero sí con alguna otra actividad.

Es raro. Estar cansada y no cansada al mismo tiempo, una especie de éxtasis religioso que te impide hacer ningún movimiento, ni siquiera encender la tele que es la activiad más pasiva, más inútil y más insignificante que se puede llevar a cabo. Ni eso. El botón de encendido está demasiado lejos y el mando también, hasta el sofá se escapa a los metros que ahora mismo estaría dispuesta a desplazarme (y vivo en 49 m2). Total que aquí me quedo, sentada en la silla, delante del ordenador, con mi manta de gatos. ¿Y vosotros/as qué hacéis?

jueves, 3 de febrero de 2011

Ya es tiempo de que me diga...

Ya es tiempo de que me diga...

Que mi sonrisa da alegría y, cada vez que regalo un pedacito de ella a los demás, desafía a la lógica aristotélica y a la metafísica, y se vuelve más grande.
Que soy estrellita brillante en el cielo de una noche de cualquier estación del año (con el permiso de Shakespeare). 
Que hoy me merezco una chocolatina simplemente porque sí.
Que mi cuerpo es bello y despierta deseo (en más de uno, así que puedo elegir).
Que no hay obstáculos insalvables porque soy capaz de convertirme en agua que fluye a través de ellos.
Que los demás pueden aprender cosas de mí porque soy un libro abierto con una nota que dice: "Leeme. Pero cuidado, no soy Dan Brown ni Ken Follet". Tiene su cosilla.
Que cuando estoy callada también estoy comunicando y que el río más profundo también es el más silencioso.
Que soy inteligente aunque, a veces, se me funda la bombilla. 
Que soy imaginativa porque soy capaz de crear con las palabras mundos propios.
Que una lágrima no me convierte en porcelana; me abre camino para ser más fuerte.
Que, en cierto modo, soy como una gata: independiente, mimosa, lista, despierta, exquisita para la comida y ¡ágil! Da igual como me caiga, siempre caigo de pie.
Que me compro zapatos "Kickers" porque todavía deseo caminar por el mundo como lo haría una niña: sorprendiéndose y haciéndose preguntas.
Que soy una buena amiga. Creo que se puede contar conmigo, al menos hasta 1.000.000.
Que si digo "no sé" es positivo. Estoy a tiempo de aprender.
Que soy muy muy divertida. El otro día conseguí hacer reír a Shortbus, mi perrito de peluche.
Que si un día me da por decir tonterías o estoy de mal humor, no pasa nada, la gente me quiere igual.
Que tengo mucho de mí que ofrecer al mundo.
Que tiene un mérito enorme correr y terminar una carrera de 42,195 Km.
Que no estoy sola ni soy invisible. Tengo muy buenos amigos y amigas.
Que puedo hacerme un nudo a mí misma y después deshacerlo.
Que elijo ser lo que soy porque me gusta cómo soy. ¡Diseño único!
Que puedo y quiero crecer como persona sin necesidad de tomar los pastelitos mágicos de Alicia.
Que soy sensible porque soy capaz de conectar con los demás, como Nokia, pero en versión cálida.
Que soy una cometa que vuela libre junto a otras cometas que siguen el mismo camino.
Que mis imperfecciones son perfectas, sobre todo, esa cicatriz de la espalda.
Que el futuro es el mejor tiempo para conjugar. Es donde se encuentran los sueños y las ilusiones.

Ya es tiempo de que me diga...

Se lo dedico a todas las mujeres y hombres que conozco, para que también escriban su "Ya es tiempo de que me diga..."

miércoles, 2 de febrero de 2011

Marketing en redes sociales

Ahora que estoy aprendiendo un poco de marketing on line, estoy pensando en la forma de encontrar seguidores/as de mi blog. Creo que puedo empezar a lanzar mis propias campañas de búsqueda potencial de lectores y fidelización de los mismos.

IDEAS 
  • Campaña nº 1: Premio al mejor comentario del blog. Se valorará originalidad y sentido del humor. REGALO: Una piruleta con forma de corazón para demostrar mi cariño y mi afecto.
  • Campaña nº 2: Premio al lector/a más participante. Dadas mis limitaciones tecnológicas, se valorará el número de comentarios (sinceros y espontáneos) que se realicen. REGALO:  Publicación de un mini-cuento especialmente dedicado. ¡Puedes ser protagonista!
Estas son sólo unas sugerencias, así que os animo a votar qué os gusta más... os dejo una encuesta con algunas opciones en la página principal. Se admiten otras.